PASAJE DEVOCIONAL: 3 JUAN 1-4

No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad. (3 JN. 4)

En la actualidad en que vivimos, cada día se levantan voces extrañas proclamando nuevas verdades, y donde de formas muy sutiles la relatividad se va colando en cada rincón de nuestra sociedad, la idea de andar en la verdad hace que surjan muchas preguntas. Dos de las que podríamos citar y quizás las más importantes son: ¿Qué es andar en la verdad? Y, ¿Cuál es la verdad? Muchas veces estas y otras cuestiones pondrán a prueba nuestra firmeza en los caminos del Señor. Como cristianas sabemos y creemos que Jesús es la única y absoluta verdad, y que esa verdad está expuesta claramente en Su Palabra. Andar en la verdad sería entonces llevar una vida consecuente con los mandatos de Dios, una vida de acuerdo a la verdad que Él nos ha enseñado. Es interesante notar cómo otras traducciones bíblicas traducen la frase «andan en la verdad», como «poner en práctica la verdad». Esto es algo más que cierto, andar en la verdad no es otra cosa que practicar la verdad en todo momento. El anciano Gayo era una persona a la que el apóstol Juan tenía en mucha estima. En su diario vivir Gayo ponía en práctica la verdad de Dios, la vivía y andaba en ella. Los que lo rodeaban y veían su integridad pudieron contarle personalmente a Juan de esto, lo cual lo llenó de mucho gozo.

Cuando andamos en la verdad, siempre seremos de impacto para todo el que nos conozca. Nuestro testimonio será real y evidente para el mundo. Pero lo que más nos debe motivar a caminar como cristianas verdaderas es que nuestro Señor también se llena de gozo al ver cómo lo honramos con nuestra vida.

Señor, guíanos y danos sabiduría para vivir en Tu verdad.

Un devocional de Devoción para el corazón (B&H en Español).