Salmos 138:8

El Señor llevará a cabo los planes que tiene para mi vida, pues tu fiel amor, oh Señor, permanece para siempre. No me abandones porque tú me creaste. —NTV

Cuando estudiaba en la universidad tuve que escribir mi plan de vida. Se acercaba el año 2000, así que la maestra nos pidió que pensáramos qué metas queríamos cumplir para esa fecha. En el 2000 yo cumpliría 25 años, así que se me figuró una propuesta interesante.

Escribí que para esa fecha yo: «estaría casada, con dos hijos, en una casa o departamento en el Distrito Federal y trabajando en una universidad dando clases». Llegó el 1 de enero y terminó el 31 de diciembre del nuevo milenio, y ninguno de mis planes se cumplió.

¿Hice algo mal? Olvidé que Dios es quien lleva a cabo los planes y que deben ser suyos. Esos eran mis planes, no los de Él, y te confieso que no fue el mejor cumpleaños. Pero hoy, muchos años después, reconozco que las promesas de Dios se cumplen y que Sus planes son mejores.

Hoy estoy casada, tengo dos hijos, vivo en provincia y trabajo desde casa. ¿Y te confieso algo? ¡Me siento plena y confiada! Porque he aprendido que Dios aún tiene planes para mí, y que son mucho mejor que lo que yo pueda soñar. No hagas planes, más bien pregunta a Dios cuál es el plan para tu vida y confía en Él.

Señor, tus promesas están respaldadas por todo el honor de tu nombre.

DAVID

Un devocional de Destellos de esperanza (B&H en Español)